Hacia la tercera semana de agosto, Fuentes de Andalucía se llena de colores, lunares, farolillos, albero, manzanilla y alegría. La vida de la localidad se traslada desde el miércoles hasta el domingo al Real de Feria de “El Postigo”. Desde el mediodía hasta el amanecer, el recinto acoge a los feriantes entre casetas, atracciones, caballistas y mujeres vestidas de flamenca.

La Feria de Fuentes de Andalucía tiene sus raíces en la antigua “Fiesta de la Ermita”, celebrada desde el siglo XVII el 12 de septiembre, en honor a la Virgen María. Durante siglos, esta festividad se llevó a cabo en torno a la ermita de San Francisco, dotando a la celebración de una conexión única y singular con su emplazamiento original.

A lo largo de su dilatada historia, la feria ha experimentado numerosas transformaciones en cuanto a fechas, propósitos, denominación, hábitos, formas, imagen y formato. Sin embargo, la esencia y el espíritu de la celebración se han mantenido inalterables. En 1948, la fiesta fue trasladada a su ubicación actual en “El Postigo”, pero los fontaniegos han mantenido viva la tradición y el nombre original a través de la transmisión oral.

La importancia de preservar la singularidad de la Feria de Fuentes de Andalucía llevó a la aprobación en pleno de una propuesta para mantener el nombre originario de la celebración. Esta medida garantiza que, a pesar de los cambios y la evolución a lo largo de los años, la Feria continúe siendo reconocida como la Fiesta de la Ermita. La conexión histórica con la ermita de San Francisco y la profunda devoción de la comunidad aseguran que la Feria de Fuentes de Andalucía conserve su identidad y tradición únicas.

Cada año, la feria no solo es un evento de entretenimiento, sino también una manifestación de la cultura y el patrimonio de Fuentes de Andalucía. La mezcla de elementos tradicionales y modernos crea una experiencia vibrante y única que atrae a visitantes de toda la región, consolidando la feria como un acontecimiento emblemático en el calendario festivo andaluz.